viernes, 8 de septiembre de 2017

UN SOSPECHOSO: AHMED BEN BAREK





     Sus ojos verdes deambulaban entre la mesa y el suelo de la sala, temerosos de mirar directamente a un público que le devoraba sin reparos. Todas las mujeres que conocía, prácticamente sin excepción, suspiraban por él cada vez que su nombre aparecía en una conversación; la conclusión era unánime. Al parecer, su galopante calvicie, encubierta por un rapado total, no hacía disminuir la locura colectiva que aquel hombre provocaba entre las legiones de féminas que año tras año, y como resultado de sesudas encuestas en las más variopintas revistas, lo elegían como uno de los hombres más sexis del planeta. Pesaban mucho más sus proporcionadas facciones y su atlética corpulencia, pero sobre todo, eran sus penetrantes ojos verdes la cualidad que la mayoría de las féminas destacaban más en su persona. Reyman opinaba que la fama del personaje, considerado el mejor futbolista del mundo, así como su voluminosa cuenta bancaria, ayudaba, y no en poco, a tal devoción. 

(Fragmento Capítulo 3 de Secretos bajo la hierba - Juan José Marín)


No hay comentarios:

Publicar un comentario

LA NOCHE

La puerta se cerró de golpe. Su cuerpo, varado en mitad del vestíbulo, se estremeció de pronto. Reyman, desorientado y asustado, buscó...